En esta ocasión la foto no es mía, está tomada de este enlace: https://expreso.press/2017/05/13/echan-la-basura-cinco-toneladas-comida-diariamente/ |
Arrastra su carrito en dirección al mercado, ajena a las prisas de los que regresan a casa. Al llegar inicia su ritual diario y comprueba atenta la mercancía que aún queda por vender. No importa si la fruta es de temporada, o si la carne y el pescado están disparatados; sus prioridades son otras. Recorre la galería puesto por puesto y después se siente en un banco de la calle a esperar. Cuando echan el cierre llega el momento de seleccionar su cena. Caducado, podrido, pocho o defectuoso son palabras que hace tiempo dejaron de tener significado para ella.
Esta historia también quedó fuera de la selección de mi nuevo libro "Diluvio personal".
Si deseas tenerlo puedes visitar el siguiente enlace a la web de la editorial. https://www.legadosediciones.com/producto/diluvio-personal/
Terrible pero real, lo he visto con mis propios ojos. Y que poca conciencia hay hoy día. Muy bueno.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Muy triste realidad de muchas personas. Una pena, pero los desechos de algunos supermercados, son la comida o cena de otros
ResponderEliminarUn abrazo y feliz martes
Algunos comienzan a tomarse demasiado literalmente eso de que la basura de unos es el tesoro de otros...
ResponderEliminarSaludos,
J.