Obsesionado por su salud cumplía a rajatabla todos los consejos nutricionales posibles para mantenerse sano. Le llamaban “el desgraciao” porque no podía tener otro apodo alguien que en el bar pedía un descafeinado con sacarina y leche desnatada. En su nevera todo estaba etiquetado como bajo en calorías o integral. No probaba la sal, tomaba alimentos hervidos o a la plancha y sólo bebía agua mineral y zumos naturales. Pese a sus obsesiones murió joven. Su pasión dietética era tan grande como la que sentía por las mujeres, y sin embargo con ellas nunca admitió ningún tipo de precaución.
P.D. Este microrrelato está incluido en mi libro. Si quieres comparlo o saber más sobre él pincha en este enlace.
Hoy me has puesto fácil la referencia sabinera: "Si lo que quieres es vivir cien años..."
ResponderEliminarSaludillos
MIGUEL:
ResponderEliminarSi es que hay mucho descabezado suelto.
Salu2.
jajaja, pensé lo mismo que Puck! jaja
ResponderEliminarla cabeza siempre cubierta!
Salud!
Je, je, las dobles morales nos rodean.
ResponderEliminarUn abrazo, Miguel.
Puck cuando escribí la historia no la hice pensando en él pero ahora que lo dices sí que veo la relación. Por cierrto, supongo que sabrás que tienes que venir a Madrid a partir de octubre a ver el musical.
ResponderEliminarSaludillos sabineros para ti.
Dyhego muchos más de los que nos creemos.
Salu2 con cabeza.
Sucede según estas las cosas es lo mejor para no tener problemas. Aunque hay veces que a muchos se les olvida.
Saludos cubiertos.
Torcuato nos rodean constantemente. De hecho vivimos en una sociedad basada en la doble moral.
Otro abrazo para ti, eso sí sin dobleces. De todo corazón.
¡Uy! he pensado este ya lo he leído, después al ver la nota ya me ha quedado claro de qué.
ResponderEliminarEs evidente que este tipo no cubría todos los frentes...
Besos
Demasiadas veces ocurre que uno pone pegas a lo superficial y se olvida de lo esencial. Humanidad, terrible masa. Abrazos.
ResponderEliminarElysa en efecto este micro está en el libro. Algunos se preocupan por todo menos por lo más importante. Besos.
ResponderEliminarMaite muchas más veces de lo que nos creemos. Y encima no hay excusa que valga. Abrazos para ti.
Algún vicio hay que tener, claro está. Y algunos, más de uno. Saludos y un abrazo, Miguel.
ResponderEliminarDicen por acá que nunca se sabe dónde salta la liebre.
ResponderEliminarMuy bueno.
En algunos momentos la razón no razona ni el cuerpo perdona...
ResponderEliminarenmalestado, ¿qué sería de una vida sin vicios? Saludos. Abrazo para ti.
ResponderEliminarJosé Manuel seguro que dónde menos se la espera. Gracias. Saludos.
depropio sobre todo a determinadas temperaturas. Un abrazo.
Si siempre se tiene un debilidad ainss
ResponderEliminarBicos grandes
Hay que tener más amplitud de miras :-)
ResponderEliminarMe gustó.
Hola buenas... primero te "robé" una foto... después me convertí en "cleptómana" y me he llevado algo más a mis jardines. Espero que no te importe :-)
ResponderEliminarSaludillos
P.D. Lo de Sabina lo tengo, lo tengo en la agenda jeje
Caremla¡qué seríamos nosotros sin debilidades! Bicos
ResponderEliminarCybrghost algunos la amplitud de miras la tienen para lo que les interesa. Sin más. Un abrazo.
Gracias a los dos por vuestras palabras
Puck tú a mí me puedes robar lo que quieras. Siempre haré la vista gorda.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por el detalle que has tenido. Ha sido una sorpresa y una gran alegría.
Esperaré lo de Sabina, no lo dudes.
Besos