Setenta años con el maestro del pueblo, codo con codo, y no ha aprendido ni a leer ni a sumar. Setenta años junto al alcalde que intentó cambiar esas leyes que nunca tenían en cuenta a los que eran como él. Setenta años sin poder besar esa foto, guardada junto al pecho, en la que su mujer sonríe ilusionada. Setenta años para abandonar ese montón de hierbajos y arena, abonados de odio y rencor. Setenta años para que ese hijo, al que nunca conoció, por fin le lleve flores y le cuente todo lo que él no pudo ver.
Durante los primeros diez años en este blog todas las historias que fui publicando estaban contadas en 99 palabras. Ahora cada una de las historias toma su propia extensión.
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ResponderEliminarSuerte, Miguel. Creo que expresas bastante bien la tristeza de esa memoria, de los que aún están esperando ser encontrados en sus fosas ignoradas.
ResponderEliminarBesitos
Demasiado tiempo sin duda. Pero lo importante es que no le olvidaron. Nadie le devolverá el tiempo perdido pero sí la dignidad, el recuerdo, el homenaje. Muy bueno.
ResponderEliminarSaludillos
hm me alegra de que te haya gustado. Y si encima no has abido bien de lo qué iba hasta el final mejor.
ResponderEliminarElysa por suerte yo no me he visto en esa situación pero creo que es algo que se está tardando demasiado tiempo en solucionar.
Puck seguro que su recuerdo ha estado siempre entre sus familiares por eso se merecen ya el descanso que todos desearíamos para los nuestros.
Saludos para los tres. Muchas gracias por haber dejado aquí vuestra aportación.
Con relatos como éste, por lo menos evitan el olvido.
ResponderEliminar¡Muy buen relato!
Nostalgia "muerta". Me gustó mucho.
ResponderEliminarMiguel Angel pues si con esto contribuye a lo que tú dices me doy por satisfecho.
ResponderEliminarGracias Cybrghost. Nostalgia muerta, que no recuerdo muerto.
Saludos para los dos. Un abrazo.
Veo que habéis participado unos cuántos, yo me lo perdí. Voy a tener que contratar un agente para que me avise de los concursos, eventos y novedades, jejeje
ResponderEliminarUn saludo indio
Todo un reto, ajustarte siempre a esas 99 palabras...
ResponderEliminarUn relato inteligente, desvela lo justo para ir manteniendo la tensión narrativa hasta liberarla en el desenlace. Elipsis en estado puro.
Saludos.
en una guerra todos pierden, sólo que los derrotados pierdes dos veces.
ResponderEliminarBuenas tardes, hemos encontrado su Web en Google y nos gustaría proponerles un intercambio de enlace (texto). Nos beneficiaría a ambos, mejorando nuestra posición en todos los motores de búsqueda.
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Odys 2.0 aunque puede decirse que ya le tengo pillado el truquillo, es ciero que en algunos no es fácil ajustarte a ellas.
ResponderEliminarvitt gran verdad eso que dices. Por desgracias siempre será así.
Saludos y gracias por pasar.
Simplemente genial.
ResponderEliminarWow, ¡qué chulísimo, Miguel! ¿Ganaste algo? Si no, es que ha habido tongo... :P
ResponderEliminarBesos
:)
Gracias David.
ResponderEliminarAcuática nada de nada. Hay demasiada gente y por suerte demasiados buenos textos en esos concursos.
Saludos