Para esta semana os dejo con mi modesta aportación al Vendaval de microrrelatos 2011. Desde aquí quiero felicitar a todos los organizadores por su maravilloso esfuerzo.
Después de muchas horas, con tocino y un chusco de pan, dos naranjas son su merienda-cena. Antonio cree que son mandarinas pero su madre asegura que son naranjas. La guerra continúa y con ella el racionamiento, la miseria y el hambre.
Cuando está a punto de llorar, por el dolor que le corroe el estómago, oye unos pasos. Al volverse ve a Lucio, con el abdomen hinchado y los ojos como platos, recogiendo las cáscaras, que casi sin pasar por sus manos, devora con ansia. Entonces es cuando, tras mirar la naranja que aún le queda, rompe a llorar.
Realmente duro, Miguel. Un retrato crudo y amargo de la pobreza y la guerra.
ResponderEliminarCuando crees que la imagen ya está completa con el tema de las naranjas y las mandarinas vas y das todavía otra vuelta de tuerca.
ResponderEliminarSaludillos
Cuentan de un sabio que un día,
ResponderEliminartan pobre y mísero estaba,
que apenas se sustentaba,
de unas hierbas que cogía.
¿Habrá otro -entre sí decía-,
más pobre y triste que yo?
Y cuando el rostro volvió,
vio a otro sabio recogiendo
las hierbas que él arrojó.
O sea, reformulaste a un clásico.
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
Durísimo Miguel!! Quedé atragantada. Menos mal que lo subiste aquí. Me lo debo haber salteado. Excelente micro!!
ResponderEliminarMe impresionó muchísimo ayer, una maravilla de la escritura y una realidad de la guerra y la hambruna.
ResponderEliminarAbrazos
Que duro es el hambre...hoy hay miles de personas muriendo de ella...
ResponderEliminarMuy buen micro!
Abrazos y arrestos para mejorar la situación mundial!!!
Corrijo por respeto a la fuente...
ResponderEliminarY cuando el rostro volvió,
halló la respuesta viendo
que otro sabio iba cogiendo
las hierbas que él arrojó.
enmalestado un retrato crudo, amargo, pero real , muy real.
ResponderEliminarPuck lo de las naranjas y las mandarinas lo he escuchado en casa más de una vez, y la segunda parte del relato igual.
Pablo Gonz si te digo la verdad no conocía el texto que has colgado pero es cierto que el micro mío trata sobre lo mismo. Sin embargo te aseguro que la hsitoria la he escuchado en casa, como le decía antes a Puck, muchísimas veces.
Saludos a los tres.
Sandra Montelpare espero que ya se haya pasado el mal rato. Es normal que no lo vieras en el vendaval porque la sucesión de micros fue alucinante.
ResponderEliminarAnita Dinamita muchísimas gracias por tus palabras. Me siento halagado.
Juanlu ojalá que con abrazos se pudiera arreglar. Desde luego biendo lo que se cuece estos días, algo más cerca estamos.
Pablog Gonz vista la corrección.
Saludos para todos. Muchas gracias por vuestras aportaciones.
Gracias a ti, Miguel.
ResponderEliminarEn cuanto a tu micro, que bueno, hijo...
joderrrr,,,vaya con las naranjas y el chusco pan. Un abrazo crack.
ResponderEliminardepropio de nuevo gracias por el trabajo hecho en el vendaval, y ahora también gracias por tus palabras.
ResponderEliminarDavid otro abrazo para ti. Ya hablaremos.
Un abrazo para los dos. Saludos
¡MUY BUEN TEXTO!!!!!
ResponderEliminarGracias Caro. Me alegro un montón de tus palabras.
ResponderEliminarSaludos.